¿Cuál era la necesidad?
Cuando le pregunté a Esmeralda sobre cuál era el objetivo que quería alcanzar con nuestra formación personalizada, me respondió: «quiero sentirme orgullosa de mi blog«. ¡Glups!- pensé, pero afortunadamente no todo dependía de nuestro trabajo. Esmeralda contaba con un blog lleno de jugoso contenido con estilo propio, muchas ideas y lo más importante, era constante. Así que sólo teníamos que ayudarle a ordenarlo todo un poco de la forma que quedara tan lucido como los bodegones de sus platos. Por si a estas alturas, no lo habéis deducido os diré que su blog es un blog de cocina: Mantelbleu. Os recomiendo seguirlo si os gusta la cocina aderezada con dosis de buen humor.
Nuestra propuesta: Un plan formación+consultoría a medida
Establecimos varias sesiones de trabajo con periodicidad semanal, para avanzar sin prisa pero sin pausa. Lo primero que hicimos fue contratar un servidor y dominio propio. Si Esmeralda quería sentirse orgullosa de su blog, tenía que tener nombre propio, lo que le daría una imagen más profesional. Ya no era www.mantelbleu.wordpress.com, sino www.mantelbleu.com. Acompañamos durante el proceso a Esmeralda para que no tuviera dudas al tomar la decisión sobre el servicio que más le convenía. Le sugerimos un proveedor y fuimos interlocutores con el mismo, ya que conocíamos bien las características del blog de Esmeralda.
Por otro lado, buscamos una plantilla de WordPress que respondiera a las características que Esmeralda nos había explicado que quería que tuviera su blog. Encontramos una plantilla que además era gratuita y la instalamos con ella en su nuevo servidor. El aspecto de su blog cambió notablemente:
A continuación, Esmeralda quería aprender todo lo que tenía que ver con el proceso tanto de editar su blog, como de promocionarlo, así que nos planteamos un programa que repasara todos los básicos: Gestión de WordPress, SEO Copy (o cómo redactar para mejorar nuestro posicionamiento), Gestión de páginas de Facebook, Pinterest y Twitter y, por su puesto, Google Analytics, para comprender qué resultados estaba obteniendo con todo su trabajo.
Durante el proceso de formación, fuimos haciendo con ella algunas mejoras en su blog. Instalamos algunos plugins, como el del índice de recetas, que va alimentando el índice automáticamente con cada nueva receta que Esmeralda escribe en su blog y que es útil no sólo para el/la lector/a, sino que además, es bueno para el SEO. También personalizamos los menús para que las categorías de las recetas salieran en el orden lógico de presentación de los platos: entrantes, primeros, picoteo (tenéis que probar sus tostas…) y postres.
Por último, me gustaría destacar un detalle más que surgió del trabajo conjunto en las sesiones de formación. Cuando expliqué a Esmeralda la funcionalidad de las etiquetas en un blog y su importancia para posicionarse en buscadores, lo captó enseguida. Rápidamente se puso el lugar de quien busca al otro lado de la pantalla (¡bravo!) y me dijo que ella creía que la gente buscaba recetas por ingredientes, por ejemplo, «crema calabaza zanahoria cilantro». Decidimos trabajar las etiquetas como eso, los ingredientes más especiales de sus recetas, los que pudieran estar buscando. De esta forma, no sólo ayudaba a la navegación por recetas, sino que colaboraba a posicionar sus resultados entre los resultados de Google.
¿Los beneficios del proceso?
Dejamos que os los cuente la propia Esmeralda:
Enseñar y acompañar a una mujer con la ilusión y ganas de aprender de Esmeralda, por no hablar de su amor por la cocina, fue un auténtico placer. Seguimos su blog y, cuando nos queda tiempo, probamos a hacer alguna de sus deliciosas propuestas culinarias.
El proyecto en 3 lineas:
- Cliente: Profesional privado
- Cuando: Abril 2014- Junio 2014
- Servicios: Formación Personalizada y Consultoría